Tom Delonge

            

Hay tantas cosas que me gustan de Tom que no sé ni por dónde empezar. Mejor por el principio. Lo conocí allá por el año 99, viendo MTV. El hit de Blink 182, All the Small Things, fue la canción con la que llegaron a hacerse conocidos en Latinoamérica. Punk californiano para skaters, con letras de chicos solitarios que salen perdiendo en el amor, tocando lo más rápido que se pueda, como si se estuviera huyendo de la muerte misma. COMPRO.

Pasaron algunos años y pensé que ya estaba. Ya la pegó. Iba a seguir haciendo discos con sus amigos hasta pelearse o hasta viejo. Entonces, en el medio de todo el éxito, la banda se toma un descanso, y él decide formar otra banda para hacer otro tipo de música. Salió Box Car Racer en el 2002 y me dije “¿Un Blink más emo?” COMPRO. En sus palabras, hacer ese disco fue como ir a la universidad.

Después hicieron el discazo intitulado Blink 182 del 2003 y la banda se separa. Arma oootra banda, Angels & Airwaves, en el 2005. Sonidos futuristas, medio espaciales, con mucho delay y sintetizadores de los 80’s. COMPRO. A esta altura suena a que compro cualquier cosa, pero juro que no es así. Lo que más me emociona de Tom es la búsqueda constante. Una búsqueda musical, pero al mismo tiempo, identitaria. Al tipo le interesaba hacer tantas cosas que dijo: “Bueno, voy a hacer todo”. Y LO HIZO. Angels & Airwaves es un proyecto no sólo musical. Es una colección de artistas. Filmó y dirigió películas, animadas y reales. Sacó comics. Hizo nueva música junto con películas animadas. Llevó su obsesión por los OVNIS a un punto tal que creó una academia de ciencias y artes, se reunió con científicos de la NASA y ex militares, buscando investigar nuevas tecnologías y logrando desclasificar videos que luego vimos en los noticieros recientemente reconocidos como reales.

Más allá de todo esto, está la música y cómo fue cambiando. Melodías que calan profundo por su simplicidad y por la emocionalidad que transmite. No siendo un guitarrista muy hábil, demostró una gran creatividad para producir riffs y melodías que son tomadas como inspiración para un montón de guitarristas como yo. Si bien en vivo no es el mejor cantante, sus desafinaciones me transmiten más cosas que un montón de cantantes afinados con menos onda que un renglón. Este señor me inspira y me dan ganas de hacer cosas.

Otro día seguimos. No escuché la campana.